Por Alberto Lati, 08 de marzo, 2018
En ningún sitio las camisetas pesan tanto, en ningún rubro los advenedizos escasean de tal manera, como en el futbol.
Basta con ver que a lo largo de la historia apenas ocho selecciones han sido campeonas del mundo y que no más de doce han accedido a una final mundialista. Lo mismo que en los últimos veinte años sólo dos equipos han conquistado su primera Champions League, siendo los demás monarcas de la vieja aristocracia del balón.