Cuando los jerarcas del futbol recurren a la desafiliación como arma, es que están acorralados. Implica su último recurso, su todo o nada, después de esa amenaza ya no les quedarán más elementos de presión, coerción o persuasión.
Cuando los jerarcas del futbol recurren a la desafiliación como arma, es que están acorralados. Implica su último recurso, su todo o nada, después de esa amenaza ya no les quedarán más elementos de presión, coerción o persuasión.