Algo prende inevitablemente cuando se enfrentan estas dos selecciones.
Cuesta creer que dos de las naciones europeas que más elementos tienen en común (historia, cultura, hábitos), difieran tanto a la hora de decidir cómo jugar al futbol.
Algo prende inevitablemente cuando se enfrentan estas dos selecciones.
Cuesta creer que dos de las naciones europeas que más elementos tienen en común (historia, cultura, hábitos), difieran tanto a la hora de decidir cómo jugar al futbol.