Por Alberto Lati, 17 de Julio, 2018
Imposible ser relativo o selectivo: tolerada o aplaudida una politización del futbol, en automático todas las demás son bienvenidas.
Adjetivos tales como lo justo, lo correcto, lo moral, lo adecuado, lo humano, resultan indispensables en todo debate, mas no pueden ser el punto de partida para éste: si se alaba la invasión de cancha de las Pussy Riot en la final –acaso porque, en mi muy específico caso, coincido con todas sus demandas y admiro su valentía–, entonces llegará el punto en que los escenarios deportivos sean tomados por quien reivindique nociones contrarias a mi parecer, incluso de apariencia siniestra o brutal.