Por Alberto Lati, 07 de Diciembre, 2018
Visto en frío, un equipo podría pensar que nada debe a quienes en el pasado ahí jugaron. Finalmente, se les pagó puntual lo que en un contrato se había estipulado, que tratándose del futbol suele ser mucho más que lo que el común de la gente sueña con cobrar en otros ámbitos. Siendo extremos, incluso no falta el club convencido de que la deuda es a la inversa: todo lo que se dio al futbolista, la oportunidad brindada, el escaparate, el acceso a títulos y un interminable etcétera.